EL CHOCLO MÁS CHICO
En la chacra de don Checho y doña Chela crecían los choclos más grandes del mundo. Con ellos hacían chuchoca y chicha de maíz.
Un día mientras don Checho cosechaba sus choclos, un chancho lo guió hacia una mata que el choclo más chico de todo Chile.
-¡Chupalla!, ¡Chita!, ¡Recórcholis!, el Choclo para Chico- dijo don Checho.
Lucas Gonzalo Grado Muñoz, 2º básico, Loess Scholl. ciudad
-Calama. Chile.
LA CHANCHITA
Había una vez una chanchita que vivía en Chile.
Un día se le ocurrió ir a un concierto de un gran cantante llamado Chachán. Cuando
llegó al Chicago-teatro sufrió una gran pena pues no pudo entrar. Muy desilusionada se fue a su casa y prendió el TV y disfrutó viendo El Chavo del ocho comiendo charquí con chirimoyas.
De tanto chillar de risa le produjo mucha sed, fue a la cocina y con un cuchillo
partió un limón para tomar una rica limonada. De tanto chalupear todo el día se
cansó y chanchamente se fue a dormir.
David Gómez Avarca, Nb 2 (4º Año Básico), Escuela E-323 "Chorrillos".
Viña Del Mar - Chile.
DESCRIPCIONES
Yo me llamo Chachi y tengo tres hermanos, uno se llama Mocho, el otro Chechu y Chacha. Mi mamá se llama Chela y mi padre Chepo.
Si quieres conocer mi país te recomiendo que visites los lugares donde voy a veces de vacaciones. Lugares hermosos como Chiloé, Chillan, Chonco, que tiene un río llamado Charango donde una vez
encontré un perrito y le puse Chocolate. También tenemos muchas fiestas y puedes conocer la
cachapalla, al chinchinero y otras grandes actividades que se realizan en este mi hermoso país
que se llama... CHILE.
Vanessa Yañez Yáñez, Nb 2 (4ª Año Básico),
Escuela E-323 "Chorrillos". Viña del Mar. Chile.
LA CHILENA
Había una vez una chilena que se llamaba Chichaenia y le gustaba la comida china, a su pareja le decían
chatarra y gustaba de las chuletas con choritos, usar chalupas y chalecos de lana.
En la cacharra sale la chilena con un rico chupete helado, pasa a las tiendas virtuales a chatear con sus amigas que le cuentan puros chismes.
En las tardes la chilena se achaca y flojea, se coloca su chamarra y chin chin se acaba su día.
Daniela Salas Toledo, Nb 2 (4ª Año Básico), Escuela E-323
"Chorrillos". Viña del Mar. Chile.
EL CHAPULÍN
Esta es la historia del chapulín colorado que tiene como misión ir a una choza a rescatar a un chivo chaparro, que estaba en
Chuchunco City, sus armas letales son el chipote chillón y la chicharra paralizadora.
En Chile nos hace falta un chapulín.
Sebastián Villar Vergara, Nb 2 (4ª Año Básico), Escuela E-323
"Chorrillos". Viña del Mar. Chile.
CHACHO, EL NIÑO
Chacho es un niño de 9 años, vive con sus padres y su hermana
Cheche, ellos están orgullosos de ser chilenos, van a la escuela de Chorrillos
E-323.
En su fiesta de cumpleaños Chacho recibió una linda chupalla.
Chacho dice al mundo de los cuentos que si visitan Chile más que un escritor
encontrarán. Los niños chilenos se preparan para aprender y llenar de chilenismos al mundo.
Francisca Antonia Valenzuela Rojas,
Nb 2 (4ª Año Básico), Escuela E-323
"Chorrillos". Viña del Mar. Chile.
EL NIÑO CON SUS
CHICHONES
En Chillan los niños de la escuelita Chorrillana presentaron un lindo acto.
El primer año mostró un baile chilote, el segundo una cacharpalla, el tercero una trastrasera y en fin todos música y bailes de Chile.
Luego de terminada la presentación fueron a almorzar.
Las tías del casino tenían preparado choclo con chuletas.
Un niño trajo de su casa un trozo de chorizo que quería compartir con sus amigos.
Un pequeño niño tiró su comida de puro pesado. Otro se paró y le dijo: ¡no seas chancho!, pero no se
dio por entendido y para peor dejo el chiquero.
Dado todo el desorden que provocó, las tías del comedor lo sacaron y se terminó la historia.
Jocelyn Guzmán, Nb 2 (4ª Año Básico), Escuela E-323
"Chorrillos". Viña del Mar. Chile.
LA MUCHACHA
CHATA
En la choza de la Charca vivía una muchacha que estaba un poco chata.
Además de esto, la muchacha era muy desprendida. "A la chatarra", decía.
Este es el cuento de la muchacha Chatarra Chata.
Sonia, 4º de primaria, colegio Ntra. Sra. de Fátima.
Galisteo (CÁCERES).
EL
CHANCHO PELUDO
Había una vez un chancho muy
travieso que iba al rancho de don Pancho y como el chancho era tan peludo, don Pancho no lo reconoció porque
parecía una oveja. Don Pancho estaba chocho y entró al chiquero para sacar al chancho y llevarlo a su rancho. Y vivió feliz con su china.
Ariano Nicolás Escobar, 3er Año -EGB 1.
Instituto Nuestra Señora de Itati Nº 1102. Capioví -Misiones-Argentina.
EL FLAUTISTA FLIQUI
EN EL PAÍS FLUORESCENTE
En un país llamado
Fluorescente el rey Flipendo tenía en su reino muchísimas ratas, entonces convocó al mejor flautista de su reino.
El rey Flipendo y Fliqui, el flautista, llegaron a un acuerdo. A la mañana siguiente Fliqui empezó
a tocar la flauta con un toque flamenco y las ratas desaparecieron bailando
bulerías.
Laura Domínguez,
EL CHANCHITO
CHUNCHULÍN
Había una vez un chanchito que se llamaba Chinchulín, vivía en el bosque de Chile con su hermana Chicha, era muy chiquita y gordita.
Una noche de mucho frío, Chinchulín se levantó a tomar un chocolate, fue a mirar por la ventana las estrellas, pero vio a Chiche, el perrito del mechón negro que había sacado una salchicha de adentro de la cocina. Su amigo el chanchito se preocupó y decidió charlar con Chiche ya que cometió una falta muy grave.
Y Chiche le dijo:
- Saqué la salchicha porque tenía hambre y estaba tirada en el piso.
El chanchito le dijo:
- No tenés que levantar las cosas del piso, porque te pueden hacer mal. Mejor tomamos un vaso de leche y nos vamos a dormir porque ya es tarde.
Alumnos de segundo año
Escuela N° 32 Iyú
Río Grande, Argentina
EL DUENDE LUCAS
Había una vez un duende travieso que vivía en un bosque en una cueva llena de trampas. En la entrada había un trébol de colores que era mágico.
Un día el duende viajó a una selva tropical a explorar, se transportó en una bici vieja, abandonada y voladora. Cuando llegó vio truenos en el cielo. La selva le hizo un truco de trampas.
La selva era muy grande, con animales tremendamente feroces, oscura, con árboles que parecían monstruos. El duende estaba asustado, se puso pálido, blanco de miedo. Comenzó a caminar y escuchó un ruido de voces, de tren y se cayó al pozo tapado por un tronco. Estaba triste y solo. Le empezaron a doler las tripas. Entonces, llegó un elefante y con su trompa sacó el tronco del pozo, sintió un ruido, se asomó y vio al duende. El elefante le dijo:
- ¿Quién eres?
Y el duende le contestó:
- Yo soy Lucas, me caí en esta trampa porque me asusté cuando escuché el trueno, el tren y las voces extrañas.
- Confundiste mi grito con el del tren, las pisadas de mi manada con el trueno y las voces con los loros.
- ¿Me podrías ayudar a salir de aquí? -pidió Lucas
- ¡Claro! Toma mi trompa y trepa.
Cuando salió, Lucas abrazó al elefante, agradeciéndole.
El duende estaba cansado de aventuras y quería regresar a casa. Recordó que tenía su trébol mágico de colores en el bolsillo izquierdo del pantalón. Hizo magia y apareció la bicicleta voladora cargada de frutas que compartió con el elefante.
Se despidió de su amigo, trepó en su bici y salió de esa selva tropical con rumbo a su cueva.
Alumnos de segundo año
Escuela N° 32 Iyú
Río Grande, Argentina
La Malvada Yarará
Había una vez una yacaré
yanqui que vivía en
Yapeyú. Le gustaba tomar mate con
yerba y yuyos en el
desayuno.
Un lluvioso día de mayo puso huevos y fue a buscar al papá
yacaré que estaba haciendo
yoga a orillas de un río. En el camino apareció una
yarará que vivía en un
yatay y estaba en ayunas y cuando vio que salió la
yacaré ya pensó en comerse a los huevos.
Entonces la yarará le pregunto:
-¿Querés que te cuide los huevos hasta que vuelvas?
-Sí, yo te lo agradezco.
La yarará pensó: ¡humm, ya me los voy a comeré!
El papagayo yugoslavo que estaba volando cerca de allí escuchó todo lo que dijo y se dio cuenta de la trampa. Fue a buscar desesperado al
yaguareté yudoca que
yacía en un yuyal a los
rayos del sol y le pidió
ayuda.
Fueron corriendo como un rayo al nido para salvar a los huevos. El
yaguareté engañó a la
yarará, sacó los huevos y dejó piedras blancas en el nido y cuando la
yarará mordió una piedra sintió un gran dolor en la boca y se dio cuenta que no eran los huevos sino que eran piedras y se fue triste al
yatay.
Producción de texto: 2do. Año - Seño Silvia: Rocío K., Rocío C., Gustavo, Leonel, Carla, Maite, Zaira, Daniela, Catalina, Karen, Ayrton, Leandro, Sebastián, Martín, Nahir, María Paz, Fernando, Mariano, Facundo, Francisco, Lucas, Brenda, Shelén y Alma.
Producción artística: Carla
Escuela Nº 32 "Iyú"
Río Grande - Tierra del Fuego - Argentina
Gala y Augusto
Érase una vez una gatita que vivía en la buhardilla de una gran casa de un pueblecito de Galicia, concretamente de
Lugo. En la buhardilla había cosas y trastos viejos, también había grandes cajas de cartón con grandes agujeros que la gatita
había hecho con sus garras, para entrar en ellas y resguardarse del frío.
Allí la gatita estaba alegre pero un poco sola, le gustaría tener un amigo para poder jugar juntos y gastar bromas a los niños que subían a jugar allí.
Un día apareció por casualidad un gran gato con grandes ojos grises.
La gatita recibía muy alegre pues el gato le gustó mucho. Le puso de nombre
Augusto, la gatita se presentó al gato diciendo que su nombre era Gala, al gato le pareció un nombre alegre y con gacho. Gala y Augusto, dos nombres muy simpáticos como sus dueños. Los gatitos muy gentiles y educados comenzaron una gran amistad, tan buena que al poco tiempo nacieron cuatro gatitos preciosos y les pusieron de nombre Miguel, Agustín, Angelito y Gruñón, porque el último gatito tenía un poco de mal genio.
Así se acaba este cuento de dos gatitos gentiles que fueron felices GALA Y AUGUSTO.
Fran Tolosa Fernández, colegio Nuestra Señora del Carmen y san Vicente de Paul.
Curso 6º A. España, Valencia.
Héctor y sus papis
Un día Héctor se fue con sus
papis a coger hierbabuena, luego fueron al híper a comprar helados. Escucharon
las noticias en hindú, hubo una explosión con bomba. Después de comer Héctor
se fue a la hamaca que estaba llena de huellas, a Héctor le entraba hipo y
estornudaba de manera poco hábil. Un hada le dio un héroe de juguete y luego
se fue al campo, allí vio un avioneta que se le rompía la hélice. Al volver
en la bicicleta se cayó y se rompió el hombro y también se rompió el hueso.
Después de salir del quirófano hablaba mucho con sus papis, Héctor tenía que
hacer los deberes y le preguntaba a su mamá: ¿que significa hazaña, heno,
hierba y holgo?
Josué Pinto, 6ºA, colegio Nuestra Señora del Carmen y
San Vicente de Paul. Valencia. España.
La buha Burbuja
Había un búho que tenía un bebé que se llamaba Burbuja que tenía 1 año y muchos amigos y sus amigos le daban besos y
el bebé tenía una tuba para que su mamá le tocara música.
Istari, curso 1ºA, CEIP Macarena "Altos Colegios".
Sevilla.
El búho
Había una vez un búho y tenía un bebé, un día un
niño perdió la pelota, su mamá le trajo el balón y una tuba. Después los niños jugaron a las burbujas en la bañera y los padres se dieron un baño en la bañera.
Se formó una fiesta y bailaron y bebieron y a los niños y chicos le pusieron un babero y limpiaron con el
vaporeto y también bebieron champán de una botella.
Teresa, curso 1ºA, CEIP Macarena "Altos Colegios".
Sevilla.
La burbuja triste
Érase una vez una burbuja muy triste que por la mañana su madre no le daba ni un beso por eso todos los días estaba triste, muy triste.
Un día unos niños le invitaron a jugar al balón y a partir de ese día todos le daban un beso.
Aida Estefanía Rosa Benítez, curso 1ºA, CEIP Macarena
"Altos Colegios". Sevilla.
El campo maravilloso
Había una vez un castor que siempre, siempre trabajaba mucho en el campo. Cada vez que iba a su casa se encontraba toda la casa colmada de rica comida. Comía carne, cacahuetes, chocolate, calamares y melocotones. Tenía una cometa de muchos colores
Clara Roldán, 1ºA, CEIP Macarena
"Altos Colegios". Sevilla.
Un día en casa
Érase una vez un niño que fue a jugar a su casa pero tenía que comer con la cuchara. Comía cocos y después jugó con su hermano pequeño y se fueron a visitar un castillo y se fueron por el camino. Colorín colorado este cuento se ha acabado.
Rafael Cantisán, 1ºA, CEIP Macarena
"Altos Colegios". Sevilla.
El campo de los enanos
Hace mucho tiempo, en el campo de
los enanos había varios combates porque unos bandidos querían el campo y siempre
enviaban cocodrilos, pero los enanos se libraban porque se escondían en una
catarata.
Luisa Villar Lara, 1º A. CEIP Macarena "Altos
Colegios". Sevilla.
La casa del cuco
Un día estaba jugando a la cometa
y se cayó.
Laura García, 1º A. CEIP Macarena "Altos Colegios".
Sevilla
Tristán va en un tren
Tristán tiene una amiga que se llama Trini. Trini tiene una piscina donde hay un trampolín; después de bañarse se montaron en un tren por la ventana del tren vieron trigo, se bajaron y comieron trucha, estaba muy buena.
Mar Cañas Vidaller, 1º A. CEIP Macarena "Altos Colegios".
Sevilla